cómo ser seguro de si mismo

Cómo ser más seguro de sí mismo

Son muchas las personas tratadas por nuestro equipo de psicólogos online arrastrando problemas de autoestima, ya sea por algún trastorno relacionado con ella o, simplemente, porque no se sienten con la autoconfianza suficiente como para enfrentarse a una situación, reto, escenario, … O como coloquialmente se dice: no están seguros de sí mismos.

Pero este término puede dar no mucho, muchísimo de sí, motivo por el cuál hemos decidido publicar este artículo relacionado con ello, donde vamos a definir el término y los tipos de perfiles, profundizaremos en él para con las relaciones de parejas, y te daremos algunos sencillos ejercicios para practicar la seguridad en tí mismo.

¿Qué significa ser seguro de sí mismo?

La seguridad en uno mismo es sentirse bien con uno mismo, seguro de nuestro propio talento de forma realista, no de modo arrogante. No significa sentir que somo superiores a los demás, sino de saber internamente y con tranquilidad, que somos personas capaces.

La seguridad en uno mismo está muy relacionada con nuestra Autoestima, un pilar fundamental en nuestro equilibrio emocional. La autoestima no es sólo querernos a nosotros mismos, sino que es algo dinámico, implica todas las emociones, pensamientos, actitudes, opiniones… que vamos forjando y acumulando desde que nacemos. La autoestima es el motor que nos ayuda a lograr nuestras metas, nos facilita la consecución de nuestros objetivos, ya que nos aporta seguridad, confianza, valor, identidad y, en definitiva, competencias y habilidades para afrontar las situaciones del día a día.

La autoestima, así como la seguridad en uno mismo, se relaciona con otros conceptos:

  • El autorrespeto, que consiste en respetarnos a nosotros mismos y tratarnos bien.
  • El autoconcepto, que es la imagen que cada uno tenemos de nosotros mismos, es la capacidad de reconocernos.
  • La autoaceptación, que implica aceptarse a uno mismo, tanto lo que consideramos positivo como lo que nos parece negativo, lo que podemos cambiar y lo que no.
  • El autoconocimiento, que es el conocimiento propio, supone la madurez de ser consciente de nuestras virtudes y defectos, apoyándonos en las cualidades positivas para mejorar nuestras limitaciones.

seguridad en nosotros mismos

¿En que se refleja la seguridad en nosotros mismos?

Cuando tenemos seguridad en nosotros mismos somos capaces de:

  • Decir no ante presiones sociales sin sentirnos culpables por ello.
  • Hacer peticiones a los demás en situaciones cotidianas y en situaciones críticas de especial dificultad.
  • Solicitar información o ayuda en recursos públicos o privados como usuarios.
  • Expresar emociones positivas, ya sea a los demás a través de cumplidos, con independencia de que los demás lo hagan, o manifestar nuestros propios sentimientos positivos.
  • Recibir emociones positivas, aceptando y agradeciendo los comentarios y sentimientos positivos de los demás hacia nosotros, sin sentir ansiedad ni quitarles importancia.
  • Expresar emociones negativas, molestia o desacuerdo, de forma directa y controlada.
  • Recibir emociones negativas de otras personas, mostrando empatía, ofreciendo apoyo o alternativas de solución de problemas, escuchando de forma activa y admitiendo errores o pidiendo disculpas si es necesario.
  • Expresar criticas y saber manifestar la oposición y el rechazo para intentar cambios en el otro, así como recibir las criticas de los demás de forma adecuada.
  • Expresar y defender nuestras propias opiniones , aun cuando sean opuestas a las de otros.
  • Negociar cuando sea necesario llegar a acuerdos, manteniendo una expresión emocional adecuada y conservando una relación positiva con el otro.
  • Defender nuestros derechos ante los demás.

Cuando somos personas seguras de si mismas nos comunicamos de forma adecuada con las personas que nos rodean, expresamos mejor nuestras necesidades y, por tanto, nos resulta más fácil solventar muchas de las situaciones del día a día. A diario nos vemos en situaciones en las que la confianza y seguridad son de vital importancia, por ejemplo, hacer una petición, invitar a alguien a salir, presentarse a una entrevista de trabajo o hacer una pregunta a alguien a quien no conocemos.

¿Cómo nos comunicamos cuando tenemos seguridad en nosotros mismos?

comunicarse cuando tenemos seguridad en nosotros mismos

Nuestra forma de comunicarnos dice mucho de nosotros mismos. Dependiendo de nuestro estilo de comunicación lograremos nuestros objetivos y podremos luchar por nuestras metas de manera más eficaz. Hay personas que tienen un estilo de comunicación demasiado pasivo mientras que otras se comportan de forma mas agresiva. Como se suele decir “en el término medio esta la virtud”, por tanto, un estilo seguro es el equilibrio entre ambos estilos de comunicación, el que deberá ser nuestro objetivo.

Estilo inhibido o pasivo

Cuando tenemos este estilo de comunicación no decimos nada sobre el comportamiento que nos molesta. Nos mostramos inseguros, tenemos miedo de actuar, por lo que abordamos las situaciones indirectamente. Tenemos expresiones como “quizás, supongo que…” “me pregunto si podríamos…”, mientras lo acompañamos de una postura inhibida, encogida, retraída… esta forma de comunicarnos nos hace sentir irritación y resentimiento, baja autoestima, nos causa conflictos interpersonales, perdemos oportunidades y no logramos nuestros objetivos. Además, los demás pueden mostrar hacia nosotros irritación o compasión.

Estilo agresivo

Cuando nos comunicamos de este modo podemos demandar un cambio inmediato en los demás, usamos la intimidación, el sarcasmo o apelamos a la violencia. Mostramos conductas de pelea, acusación o amenaza y no tenemos en cuenta los deseos y sentimientos de los demás, es frecuente mantener la mirada fija, tener gestos amenazantes y una postura intimidatoria, elevamos la voz, damos mensajes impersonales y llegamos a tener enfrentamientos. Además, damos ordenes e interrumpimos y lanzamos mensajes del tipo “si no tienes cuidado…”, “deberías…”, “no tolero…”. Como consecuencia sentiremos tensión, enfado, descontrol, culpa, frustración… logramos nuestros objetivos, pero a base de dañar a los demás, por lo que la gente que nos rodea tiende a alejarse, aumentando nuestros sentimientos de inseguridad.

Estilo asertivo

Entre ambos estilos de comunicación nos encontramos con la Asertividad, que permite que seamos capaces de exponer libremente nuestras opiniones, respetándonos a nosotros mismos y a los demás, nos ayuda a lograr nuestros objetivos. La conducta asertiva se asocia con la confianza y seguridad en uno mismo, así como con una buena autoestima. Cuando somos asertivos expresamos lo que queremos de forma honesta, indicamos a los demás lo que deseamos, pero siempre mostrando respeto y defendiendo nuestros intereses sin permitir que los demás se aprovechen.

Para ello debemos mantener un contacto ocular directo, nuestro habla debe ser fluida y la voz en un tono conversacional, debemos mantener el gesto firme y la postura erguida, con las manos sueltas y hacer verbalizaciones positivas. Es importante para mantener un estilo asertivo y transmitir seguridad en nosotros mismos expresarnos siempre en primera persona, haciéndonos responsables de lo que pensamos y sentimos, al mismo tiempo que incluimos a nuestro interlocutor, como por ejemplo “pienso”, “quiero”, “siento”, “hagamos” o “¿cómo podemos resolver esto?”, “¿qué piensas?”, “¿qué te parece?”. Cuando nos comunicamos de este modo es más fácil resolver los problemas, nos sentimos satisfechos y nos gustamos más, en definitiva, nos sentimos más seguros de nosotros mismos.

Cómo ser seguro de sí mismo en una relación

seguro de si mismo en una relación

Cuando carecemos de seguridad en nosotros mismos encontramos más dificultades para relacionarnos con personas del otro sexo, generándonos sentimientos de falta de valía y de falta de habilidades para conquistar o seducir y desenvolvernos en el medio.

Puede incluso llevarnos a establecer relaciones de pareja con personas inadecuadas, conflictivas, o que también muestran problemas de autoestima, desembocando en relaciones tóxicas o dañinas. También nos pueden ocasionar graves trastornos en la vida marital que requieran la ayuda de un psicólogo especializado en terapia de parejas.

La seguridad en uno mismo cuando estamos en una relación de pareja se pone de manifiesto cuando somos capaces de expresar y aceptar nuestras propias necesidades y las de nuestra pareja. Se trata de sentirnos valorados como personas y también como pareja, apoyando, comprendiendo y entendiendo del mismo modo que somos apoyados, entendidos y comprendidos. Para ello es importante el trabajo sobre la autoestima, nuestro autoconcepto, nuestra autoimagen y cómo nos valoramos a nosotros mismos.

Las personas tendemos a proyectar todo aquello que tenemos dentro, de forma que cuando tenemos una actitud positiva y nos sentimos bien, proyectamos esta imagen al exterior y nos comportamos de esta forma.

Las relaciones de pareja se construyen sobre los cimientos de la propia autoestima de forma que cuando uno de los miembros de la pareja no se siente bien consigo mismo, no se valora o no tiene seguridad, tiende a tratar de desvalorizar a la otra persona para conseguir ese sentimiento de superioridad que necesita.

Sentirnos seguros de nosotros mismos no solo mejorará la relación, sino que nos hará sentirnos mejor y más felices. Para ello no debemos olvidar que:

  • Nuestra pareja forma parte de nuestra vida, no es nuestra vida

No debemos intentar fusionarnos con nuestra pareja, somos una persona única e individual, por lo que debemos vivir nuestra vida siendo nosotros mismos, con nuestros miedos, defectos y virtudes, ya que siendo así es cómo es como nuestra pareja se enamoró, debemos ser capaces de estar solos y ser autosuficientes.

  • La seguridad en nosotros mismos nace de sentirnos bien con cómo somos

La seguridad no nace del exterior ni de las cosas que tenemos, nace de querernos a nosotros mismos de verdad, de ser conscientes de que somos únicos y diferentes de los demás, especiales.

  • Recibimos lo que damos

Debemos centrarnos en todo lo positivo que hay en nuestra pareja, decírselo y hacerle saber lo bien que nos hace sentir, no criticarle. Del mismo modo, nuestra pareja nos debe tratar con respeto y educación y para eso debemos asegurarnos de que mantenemos una relación sana, de que nuestra pareja nos da lo mismo que el o ella recibe, no debemos conformarnos con críticas y comportamientos negativos.

  • Debemos tener nuestros propios intereses

Las relaciones mas felices y sanas dedican el mismo tiempo a hacer cosas por separado que juntas, es importante tener nuestros propios intereses y dedicarles tiempo.

  • Abrámonos a nuestra pareja

Hablar de temas íntimos y propios con nuestra pareja creará unión entre nosotros, nos hará sentirnos mas seguros con el o ella, abrirnos tal y como somos, sin apariencias ni engaños.

Ejercicios para mejorar la seguridad en uno mismo

mejorar la seguridad en uno mismo

Para mejorar la seguridad en nosotros mismos y ganar confianza necesitamos mantener una adecuada actitud interna que favorezca el cambio, además de poner en práctica algunas habilidades de comunicación. Se trata de construir una actitud de confianza mental, reentrenar nuestra voz interior cuando nos diga “no puedo”, para que nos de mensajes del tipo “sé que puedo hacer esto si pongo toda mi atención”. Hay personas que cuentan con más destrezas para mostrar su seguridad, mientras que otras necesitan más práctica, pero todos podemos mejorar.

Debemos olvidarnos de las dudas sobre nuestras habilidades ya que nos hacen sentirnos inferiores y poco válidos, así como evitar las comparaciones con otras personas siempre que éstas nos hagan sentirnos mal con nosotros mismos.

Un ejercicio para mejorar la seguridad en uno mismo puede empezar por que asumamos riesgos seguros, intentando cosas que nos resulten fáciles, más adelante podemos ponernos a prueba desafiándonos a hacer algo que esté fuera de nuestra zona de confort, darnos un empujoncito e intentarlo.

Es importante, sobre todo, tener en cuenta cuáles son nuestros pensamientos en las situaciones en las que mostramos mas inseguridad. Esos pensamientos, nuestro lenguaje interno, son clave para que nos dejemos llevar y mostremos lo mejor de nosotros mismos, ya que los pensamientos erróneos, por el contrario, son los que nos impiden autoafirmar nuestra propia valía y nuestras posibilidades de forma realista y optimista.

También podemos observar en que situaciones nos sentimos más seguros. Normalmente las personas nos comportamos de uno u otro modo en función de la situación, de forma que cuando estamos entre amigos o en situaciones informales, por ejemplo, nos resulta más fácil mostrar seguridad que cuando nos vemos en situaciones nuevas o rodeados de desconocidos. En estos momentos podemos intentar imaginar cómo actuaríamos si estuviésemos con nuestros amigos más cercanos.

Pensamientos positivos como ejercicio de seguridad en uno mismo

Uno de los mejores ejercicios para mejorar la seguridad en uno mismo pasa por sustituir todos esos pensamientos negativos de los que hablábamos antes, por otros mas positivos que nos ayuden a ver el lado bueno de las cosas, facilitando así que mostremos más seguridad.

Algunos de estos pensamientos adecuados para sentirnos seguros de nosotros mismos pueden ser:

“Nadie es más o menos que nosotros”

Reconocer esto e interiorizar este mensaje es muy importante, tenemos que saber que cualquier persona es igual a nosotros y todos tenemos los mismos derechos y obligaciones, por tanto, aunque cada persona aportemos algo diferente en cada momento, todo depende de las habilidades que tengamos, para ello debemos intentar crecer como personas sin juzgar ni compararnos con otras personas.

“Cada uno de nosotros somos únicos”

En el mundo no existen dos personas iguales así que no debemos olvidar que cuando algo es escaso aumenta su valor. Del mismo modo, debemos tener claro que para que las personas nos valoren, tendremos que empezar por reconocer nosotros mismo ese valor, interiorizarlo y trasmitirlo a los demás para que lo perciban igual que nosotros. Cuando dejamos de preocuparnos por nuestra propia relevancia porque sabemos que está ahí podemos ver las cosas maravillosas que otros nos pueden ofrecer.

“Todos sentimos lo mismo”

Todos sentimos miedo e inseguridad en muchos momentos, da igual quienes seamos o el nivel social o jerárquico que tengamos, todos en ocasiones sentimos emociones negativas. Lo que nos diferencia es si ese miedo nos paraliza o nos empuja a actuar. Cuando tenemos seguridad en nosotros mismos no usamos el miedo como excusa, sino que lo reconocemos como normal, aceptándolo y continuando nuestro camino.

“No podemos gustarle a todo el mundo”

En ocasiones vamos por la vida tratando de caerle bien a todos o de complacer a los que nos rodean, pero nos equivocamos, si solo buscamos caerle bien a los demás, siempre viviremos a costa de otros. Negarse de vez en cuando es saludable y nos aporta la confianza de explicar por qué decimos que no.

“Tenemos que ser nosotros mismos”

Para demostrar seguridad es importante que seamos nosotros mismos, que recapacitemos y examinemos lo que más nos gusta para actuar de ese modo. Dejemos que los demás nos vean tal y como somos, con nuestros errores e inseguridades, asumir y aceptar nuestras peculiaridades en lugar de intentar ser otra persona. Ser auténticos es mas efectivo que parecer alguien importante.

“La felicidad está dentro de nosotros”

Para ser seguros de nosotros mismos debemos ser felices con lo que hacemos, encontrar la satisfacción en nuestros propios logros sin importarnos lo que la gente diga.

“Equivocarse no es malo”

Los errores son oportunidades para aprender y mejorar, no debemos temer equivocarnos, sino que debemos luchar por alcanzar el éxito sin que nada nos detenga. Preocuparnos por lo que podría salir mal nos impide avanzar en el logro de nuestros objetivos.

“Pedir ayuda no es señal de debilidad”

Conocer bien nuestras fortaleces y debilidades nos permite apoyarnos en los demás cuando sabemos que tienen una característica necesaria para lograr algo de la que nosotros carecemos. Aprender de alguien con experiencia es una genial forma de mejorar.

En resumen, es importante dejar a un lado nuestros miedos y demonios, no creer en ellos y trabajar nuestra seguridad, nuestra autoestima, nuestra valía, sacando lo mejor de nosotros mismos y convirtiéndolo en un hábito. Vivir con libertad y construir una buena confianza en nosotros nos permitirá ser personas con mayor seguridad en nosotros mismos.

 

Valora este artículo sobre cómo ser seguro de sí mismo

5/10 - (3 votos)

Sobre el autor

2 comentarios en “Cómo ser más seguro de sí mismo”

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio

Estamos utilizando en nuestra web cookies propias y de terceros con las que mejorar tu experiencia. Si continuas navegando, consideraremos que las estás aceptando. +info

Ir al contenido